En un evento que reunió a autoridades de la Universidad de Santiago de Chile (USACH) y de la Comisión Chilena de Energía Nuclear (CCHEN), junto a empresas e instituciones vinculadas al ámbito minero, se oficializó el cierre del proyecto denominado “Obtención de concentrados de Elementos de Tierras Raras (ETR), a partir de minerales prospectados en la Región de Atacama, mediante la aplicación de proceso a escala piloto”.
Esta iniciativa, liderada por CCHEN y USACH, contó con el financiamiento del Fondo de Fomento al Desarrollo Científico y Tecnológico (FONDEF) de CONICYT y del Fondo Desarrollo Regional de la Región de Atacama. También recibió apoyo por parte de la Empresa Nacional de Minería (ENAMI).
Su objetivo se centró en la producción de concentrados de óxidos de ETR, aplicando metodologías basadas en procesos hidrometalúrgicos, a partir de minerales procedentes de la Región de Atacama. Por eso, una primera etapa de trabajo contempló la validación de procesos realizados a nivel de laboratorio, para luego centrarse en la obtención de concentrados de ETR a nivel piloto.
En la ceremonia, el Director Ejecutivo de la CCHEN, Jaime Salas Kurte, señaló que “somos una institución del Estado que busca generar valor público, y dentro del valor público está el desarrollo tecnológico. Estos principios cobran especial relevancia hoy, cuando tenemos el desafío de avanzar como país, proyectando nuestro desarrollo más allá de las materias primas. En ese sentido, este tipo de materiales presentan un alto potencial estratégico”.
Por su parte, el Vicedecano de I+D de la USACH, Cristián Vargas Riquelme, destacó que “ser partícipes de iniciativas de esta naturaleza representa, sobre todo, una oportunidad para aumentar la transferencia y desarrollar aplicaciones que van en directo beneficio de nuestra sociedad y del país”.
En la ocasión también estuvo presente la Corporación Alta Ley, a través de su Director de Tecnología e Innovación, Agustín Sepúlveda, quien expuso acerca de los desafíos de la industria, que apuntan a una minería verde, más sustentable e inclusiva.
Sepúlveda hizo hincapié en la importancia de “desarrollar una industria de bienes y servicios basada en ciencia y tecnología, con aplicación en la minería, para abordar los desafíos de productividad de esta industria, mediante la generación de un ecosistema de innovación que integre a industria, proveedores, sector científico-académico y Estado”.
Continuando con el programa de la jornada, el Dr. Francisco Cubillos Montecino, académico del Departamento de Ingeniería Química y responsable del proyecto en la USACH y Pedro Orrego Alfaro, investigador del Departamento de Materiales Avanzados de la CCHEN y director del proyecto, expusieron sobre la metodología de trabajo y los resultados obtenidos tras su desarrollo.
En esa línea, se determinó que el concentrado obtenido es considerado materia prima para producir óxidos de ETR en forma individual, es decir, compuestos como óxido de lantano (La2O3), óxido de cerio (Ce2O3), óxido de escandio (Sc2O3) y óxido de itrio (Y2O3), entre otros. Cada uno de estos compuestos es obtenido en forma posterior al concentrado que se buscar lograr a través de este proyecto, mediante la aplicación de una serie de procesos hidro y pirometalúrgicos.
“Obtener concentrados de ETR en Chile permitirá, en primer lugar, diversificar la minería nacional y no depender solo de cobre, oro o plata. Además, le da nuevas oportunidades a aquellos mineros que poseen estos elementos en sus pertenencias, al abrirse un nicho para la explotación de sus minerales, los que hoy no están siendo explotados por desconocimiento de su beneficio metalúrgico”, comentó Pedro Orrego, quien agregó que “trabajar en este proyecto nos permitió aumentar conocimientos sobre el comportamiento de las ETR, al estudiar su recuperación, concentración y purificación desde menas minerales diferentes a las típicas portadoras”.
Elementos de Tierras Raras (ETR)
El grupo de ETR es conformado por el itrio (Y) y escandio (Sc), junto a 15 elementos químicos de la tabla periódica que pertenecen al conjunto de los lantánidos, esto es, lantano (La), cerio (Ce), praseodimio (Pr), neodimio (Nd), prometio (Pm), samario (Sm), europio (Eu), terbio (Tb), disprosio (Dy), holmio (Ho), erbio (Er), tulio (Tm), iterbio (Tb), gadolinio (Gd) y lutecio (Lu).
Cabe mencionar que su nombre no significa que sean poco abundantes en la corteza terrestre, de hecho, existen cantidades similares de itrio, lantano y cerio en comparación con el cobre.
Sobre sus usos, estos son múltiples, abarcando desde cerámicas y electrónica, hasta piezas para equipos de alta tecnología. Asimismo, se emplean para hacer imanes permanentes para motores, generadores, discos duros, micrófonos, parlantes, refrigeración magnética y equipamiento militar.
Por: Comunicaciones CCHEN